Agencias Detectives Privados

Por estafa se entiende aquel delito en el cual un sujeto, con ánimo de lucro, utiliza engaño suficiente para producir un error en otra persona, induciéndole a realizar un acto de disposición en perjuicio propio o ajeno.

Así, de forma resumida los elementos que intervienes en una estafa, conforme al Código Penal, son tres:

  • Ánimo de lucro: Ánimo de enriquecerse con la estafa.
  • Engaño bastante para producir error en otro: Debe existir un engaño sobre una persona y que este engaño sea suficiente para hacer que esta persona caiga en un error.
  • Acto de disposición en perjuicio propio o ajeno: Debe propiciar una acción que lleve a realizar un acto de disposición, ya sea en perjuicio del propio sujeto estafado, o de cualquier otro.

La entrada de las redes sociales y de Internet en nuestro día a día, si bien nos aporta muchas ventajas en nuestra vida cotidiana, también ha facilitado las actuaciones a este tipo de ciberdelincuentes que encuentran en el supuesto anonimato que proporciona el ciberespacio, el medio perfecto para ejecutar múltiples actos que conforman las nuevas estafas por Internet.

Como se puede imaginar, existen diversos tipos de estafas en Internet, desde el “Carding” (uso de una tarjeta de crédito, cuenta bancaria u otra información de banco por parte de un sujeto no autorizado), pasando por donaciones de caridad a ONG falsas, amenazas de secuestros virtuales irreales, falsas ofertas de empleo, aviso de falsos virus y compra de software, falsas multas o cheques regalo, etc…

Investigación de estafas por Internet por parte de detectives privados

El problema de este tipo de estafas en Internet radica en que no son fáciles de entender ni tampoco son muy comprensibles los mecanismos que se utilizan. Debido a la globalización y al incremento de las nuevas tecnologías desde hace años hasta la actualidad, la investigación privada ha adaptado su labor de investigación a esta cambiante realidad y cuenta con las capacidades informáticas y de inteligencia necesarias para averiguar y obtener, a través de acciones legales y autorizadas, todo tipo de información imprescindible para el éxito de estas investigaciones.

A través de una exhaustiva investigación privada, los detectives privados con una formación específica en este campo delictivo podrán obtener datos, información y pruebas potentes para demostrar ante la autoridad judicial el delito online cometido y hacer valer en sede judicial sus informes y peritajes.

Nuevas estafas por Internet e investigación privada

En cuanto a las estafas más comunes por Internet podemos destacar las siguientes:

  • Alquileres de viviendas vacacionales: inmuebles con prestaciones muy buenas a precios imposibles en relación a la calidad, localización o prestaciones del inmueble. Se anuncian en portales con gran prestigio y con propietarios siempre fuera del país.
  • Compras online: suelen contener las siguientes características:
    • Venta de productos que son copias de originales o totalmente diferentes al que se ofertaba.
    • Cobros de cantidades superiores a las acordadas.
    • No cumplimiento con los plazos acordados.
    • Imposibilidad de ponerse en contacto con la supuesta empresa.
  • Estafa sentimental: el delincuente suplanta una identidad o crea un perfil falso en redes sociales y se gana la confianza de la víctima pidiendo envíos de dinero por cualquier razón. También puede solicitar fotos de contenido personal para poder posteriormente extorsionar a la víctima a cambio de dinero.
  • Falsos préstamos: aprovechándose de la desesperación de la víctima se ofrece un crédito económico. Las principales características de estos préstamos son, entre otras:
    • Ofrecer intereses demasiado bajos.
    • No trabajar con una empresa prestigiosa.
    • Usar cuentas de correo gratuitas para realizar trámites.
    • Pedir dinero por adelantado por, supuestamente, gastos de gestión.
    • Realizar las transacciones a través de bancos extranjeros.
  • “Phishing”: A través de un mensaje de correo electrónico el delincuente se hace pasar por un banco o una empresa conocida ofreciendo cierto servicio para el cual la víctima deberá rellenar o actualizar unos datos después de acceder a un “link” o enlace particular. Dentro de este tipo de estafa tenemos algunas variantes:
    • Pharming: no se envía un correo electrónico sino que el delincuente aprovecha una debilidad de la página web del sitio oficial en el que se está navegando para introducir su “link”
    • Vishing o SMiSing: a través de una llamada telefónica o un mensaje, se pide a la víctima que llame a un número de teléfono concreto para entrar en un sorteo y obtener el delincuente un beneficio monetario gracias a esa llamada o mensaje.